miércoles, 2 de febrero de 2011

Ciudades Invisibles

Le cittá invisibili es una novela del autor italiano Italo Calvino. En ella, el explorador Marco Polo le trata de describir al Kublai Khan las ciudades que se encuentran en su vasto imperio, tan vasto que ni el propio Kublai Khan lo conoce.

Inspirados por la novela, Fällt Publishing, una disquera especializada en música electrónica minimalista, decidió curar una exhibición llamada, predeciblemente, Invisible Cities. Para la exhibición, los curadores le pidieron a 24 artistas de 24 ciudades diferentes que realizaran una pieza sónica en representación de su ciudad. Los resultados son diversos: podemos escuchar desde las típicas grabaciones de campo hasta piezas ultra-minimalistas apenas audibles.

Si quieren dar un viaje audible por ciudades invisibles, pueden visitar la website de Fällt y descargar cada una de las 24 grabaciones.

(Invisible Cities, Jonas Dahlberg. Instalación de video. Descargable en Ubu.)


Ahora, si prefieren dar un viaje visible por ciudades inaudibles (?), más bien deben seguir a Jonas Dahlberg, un artista sueco especializado en video-instalaciones, que también realizó una obra inspirada en el libro de Calvino.

Dahlberg creó una vídeo instalación llamada, predeciblemente, Invisible Cities, en la que podemos recorrer lo que pareciera ser una ciudad completamente deshabitada. Interesado por aquellos lugares "olvidados" por los políticos y los urbanistas, Dahlberg filmó varias ciudades que no son lo suficientemente pequeñas para ser pueblos ni lo suficientemente grandes para ser capitales o cabeceras de provincia.

La ciudad que aparece en esta instalación pareciera ser uno de esos aburridos y callados suburbios que llevan a los adolescentes a, no sé, experimentar con drogas o andar en patineta. Estas ciudades no solo son invisibles para los medios o los políticos, sino que su alienante y repetitiva conformidad las hacen invisibles a nuestros ojos, indiferenciadas las unas de las otras.

Pueden ver el vídeo en UbuWeb. Dura 46 minutos (aunque en realidad son 23 minutos ya que se repite dos veces) y no tiene sonido. Pero esto supongo que tiene más que ver con el hecho de que es una instalación que con alguna decisión consciente del artista. Entonces acompañenlo con su música de apreciación arquitectónica favorita (tal vez con algunas de las piezas del Invisible Cities de Fällt. A/V City mash-up!).