sábado, 23 de abril de 2011

La soledad al final del mundo

La soledad es algo acerca de lo que reflexionamos constantemente aquí en La Chop Shop. Particularmente acerca de la diferencia entre "solitude" y "loneliness"; es decir, por un lado, la soledad que se busca y, por el otro, la soledad que se siente y no se controla.

Carlos Casas, un aclamado documentalista español, se ha planteado pensamientos similares por lo que, armado con su cámara, decidió viajar a algunos de los lugares más recónditos del mundo para conocer a las personas que viven su vida en el medio de la nada. De estos viajes resultaron tres películas que, en su conjunto, conforman la llamada End Trilogy.


El mejor de estos tres documentales es Solitude at the End of the World, el único que aborda abiertamente el tema de la soledad. En este filme, Casas narra la historia de tres hombres que viven en la Patagonia argentina, completamente ajenos al contacto humano por buena parte del año.

Los tres hombres acabaron en la Patagonia por diferentes razones (exilio político, necesidad económica) pero todos comparten una suerte de encanto por esa tierra inhóspita e inconmensurable que los ha acogido. Y a pesar de que se han acostumbrado a su vida al margen de la sociedad, estos son hombres que parecen vivir siempre de la mano de sus recuerdos, los cuales se hacen especialmente fuertes ante el aislamiento en el que se encuentran.

De cierto modo, lo que estos hombres nos dicen es que no se sabe lo que se tiene hasta que se ha perdido, aún cuando esa pérdida no sea necesariamente algo malo. Y es esa ambivalencia la que retrata Casas con un estilo discreto y sutil que, sin mayor refinamiento visual, permite a los personajes contar su historia a la vez que resalta el paisaje tan extremo y hermoso que los rodea.


Las otras dos películas de la End Trilogy son Aral. Fishing in an Invisible Sea y Hunters Since the Beggining of Time. Estos dos documentales tiene un estilo más afín a la antropología visual y buscan explorar las tradiciones y culturas de dos pueblos cuyo modo de vida se encuentra al borde de la extinción: los pescadores del Mar Aral en Uzbekistán y los cazadores Chukchi en Siberia. Aquí los temas de soledad y aislamiento pasan a un segundo plano, enfatizandose más bien las dificultades para subsisitir que experimentan estos pueblos nativos y olvidados.

Los tres documentales se pueden ver completos (a excepción de Hunters, el cual se presenta en una versión abreviada) en el canal de Carlos Casas en vimeo. Incluso, si uno se encuentra registrado en ese sitio, se pueden bajar gratuitamente.

Y para seguir con la economía del regalo, Sebastián Escofet, el músico argentino que se encargó de realizar la banda sonora de "Solitude..." y "Hunters...", tiene en su página web esos dos discos para descargar gratuitamente. La música es mayoritariamente ambient, pero es placentera y hasta conmovedora. Vale la pena la descarga.

Por último, y para cerrar esta breve reflexión acerca de la soledad, le cedo la palabra a Jorge Stylarek, uno de los tres hombres entrevistados en Solitude at the End of the World, quien describe muy bien la ambiguedad que provoca este sentimiento:

"La soledad significa mucho, es decir, a vos te gusta porque querés olvidarte un poco del mundo, del ruido, no querés televisión, no querés prensa, no querés radio...pero después se te hace una carga, un peso: vos estás solo, tan solo, que de pronto necesitás esa compañía, esa relación humana. Uno la vive, la palpa, la mastica y dice "no estoy en condiciones de seguir siendo el solitario que quise ser".

martes, 19 de abril de 2011

Ellie Ga: Cuando El Norte Estaba Aquí

Ellie Ga es una artista neoyorquina, especializada en trabajos multimedia, que combina géneros como la memoria, la crónica de viaje y el documental; ya sea por medio de escritura, fotografía, instalaciones, vídeos, performances, o todas al mismo tiempo.

Para su último proyecto, Ga viajó por varios meses a bordo de El Tara-un barco de investigación alojado en el medio de una capa de hielo en el Océano Ártico-con la intención de documentar e interpretar las experiencias vividas en una de las regiones más remotas e inhóspitas del planeta.

Como El Tara viajaba en medio de una capa de hielo, la embarcación no tenía dirección propia, sino que se movía en la dirección que el hielo siguiera. Según Ga, esto llevó a que todos los miembros de la tripulación se obsesionaran por conocer hacia adonde los llevaría el hielo y cuando podrían salir de él.

Así lo expresa la propia artista:

" Unlike days of old when explorers spent most of their time figuring out where they were, we knew exactly where we were at every moment. It was where we were going next and how long it would take to exit the ice that eluded us."

Esa necesidad de predecir sus próximos destinos vendría a informar gran parte del trabajo artístico que Ellie Ga realizó basado en la expedición, una vez que El Tara tocó tierra firme en Febrero del 2008. A partir de ese año, Ga ha venido desarrollando una serie de exposiciones y conferencias bajo el nombre de "The Fortunetellers", en las que trata de presentar las vivencias, rutinas y obsesiones nacidas de tan singular expedición.

El nodo central de este proyecto es una conferencia-performance titulada, precisamente, The Fortunetellers, en la que por medio de diapositivas sobreimpuestas, fotografías, vídeos, mapas, diarios y anécdotas, Ga recrea, desde su perspectiva personal, los eventos más importantes y las emociones más íntimas del viaje.

La conferencia es acompañada de una exposición, con el nombre de At The Beginning North Was Here, en la que se exhiben las imágenes, los bosquejos, las grabaciones de campo y los vídeos que la artista realizó en la embarcación.

No solo eso, sino que el proyecto incluye también un trío de folletos, publicados por Ugly Duckling Presse (co-fundada por Ga), en el que se pueden apreciar las diversas maneras en que los tripulante de El Tara crearon sus cartografías personales del viaje; ya fuera algo tan complejo como el trayecto tomado por la capa de hielo o algo tan cotidiano como las caminatas que realizaron diariamente alrededor del barco.

Si están en Suecia, pueden visitar la exposición hasta el 28 de abril en Estocolmo. O si están en París, pueden tratar de ir a alguna de las performances de The Fortunetellers que Ellie Ga estará realizando durante este mes. Pero como probablemente no están ni en Suecia ni en Francia, nada más nos queda la soledad impersonal de los siguentes links, aunque en este caso vienen bien interesantes:

  • Primero, pueden visitar este reportaje "interactivo" que Ga escribió acerca de su expedición para la revista multimedia online TripleCanopy. Está lleno de imágenes, crónicas y hasta sonidos ambiente grabados en el Ártico.
  • Segundo, están los reportes que Ga escribía periódicamente en El Tara y que luego eran enviados hasta su agencia en Nueva York.
  • Tercero, y si no quieren leer tanto, tienen esta entrevista con la artista y un par de artículos de Artforum que describen su proyecto artístico.
  • Por último, claro, está la página oficial de Ellie Ga, la cuál es simple de diseño pero cargada de información y fotografías. Ahí también pueden ver los trabajos anteriores de Ga.

Y para cerrar, los dejo con uno de los vídeos creados por Ga para la exposición y las conferencias. Ahí se puede apreciar la mezcla de documental, anecdotario y reflexión onírica que caracteriza a este proyecto.