viernes, 27 de marzo de 2009

Ry Cooder y su Trilogía Californiana


Ry Cooder, maestro de la guitarra slide en una carrera que lleva ya casi cuatro décadas, ha sido más reconocido en los últimos años por su participación en bandas sonoras para películas de cineastas como Wim Wenders y, principalmente, por organizar y producir la reunión del afamado Buena Vista Social Club. Fue hasta el 2005 que Cooder volvió a trabajar en un proyecto completamente personal, lanzando ese año el primer disco de lo que vendría a ser una trilogía de discos conceptuales dedicados a su California natal.


Chávez Ravine es un disco/documento histórico que busca relatar la historia de la desaparecida comunidad angelina de Chavez Ravine y su eventual destrucción para dar lugar a lo que vendría a ser el Dodger Stadium. Chávez Ravine estaba poblada a mediados del siglo pasado principalmente por inmigrantes mexicanos y Cooder, sabiamente, decide darle gran espacio a voces mexicanas, algunas de las cuales, como la del padre de la música chicana Lalo Guerrero, vivieron en Chávez Ravine antes de su destrucción. Por lo tanto, el lenguaje tanto vocal como musical del disco en su mayoría es el español por lo que se repasan géneros originados al sur del Río Grande como los corridos, los guaraches, el boogie y la rumba.


Líricamente, el disco nos presenta incontables perspectivas que nos ilustran una nostálgica imagen de lo que eran las comunidades hispanas de Los Ángeles en los años 50. Tenemos a estadounidenses maravillados al ver por primera vez a Chávez Ravine, a la exasperada madre quejándose de la rebelión de su hija adolescente, a los pachucos peleándose con los marinos estacionados en Los Ángeles durante la guerra, a los administradores de la ciudad planeando la destrucción de la comunidad, al operador de la bulldozer encargado de traerse abajo las casas, al melancólico anciano rememorando acerca del viejo barrio y, como pieza central, la visita de un extraterrestre que trata infructuosamente de alertar a la comunidad de su inminente destrucción. Y para aquellos que se nos para el pecho con cualquier mención de Costa Rica en algún medio internacional el disco cierra con un poema costarricense titulado Luz y Sombra (el cual Cooder dice que encontró por primera vez escrito en un árbol durante una visita a nuestros bosques nublados) el cual sirve como una especie de celebración de aquellos tiempos en que los humanos nos encontrábamos rodeados más por arboles y plantas que por edificios y autopistas.


Con el segundo disco de la trilogía, lanzado en 2007 bajo el titulo de My Name Is Buddy, Cooder pone su atención en las primeras décadas del siglo XX, época fértil para lo que fue el inicio de la organización laboral estadounidense y sus luchas por mejores condiciones de trabajo. Estados Unidos, siendo una sociedad liderada por magnates a los que siempre les fue más conveniente exaltar el mito del éxito individualista, le pasó el bulldozer por encima a estos tiempos de rebelión sindicalista pero, al igual que con Chávez Ravine, Cooder lo rescata de los escombros para relatar la historia de una Norteamérica ahora desconocida.


En esta ocasión los protagonistas son un gato rojo llamado Buddy, un ratón de nombre Lefty y el Reverendo Tom, un sapo negro (con la aparición especial de J. Edgar Hoover representado como un cerdo intolerante). Ellos tres recorrerán toda California organizando y participando en huelgas laborales, viajando en trenes, sufriendo golpizas por parte de la policía, huyendo de pueblos racistas, quejándose del desinterés de los políticos para con la clase trabajadora y, por supuesto, enamorándose de simples chicas de granja (como dato interesante, en este disco también aparece un extraterrestre, en este caso, un perro verde). My Name is Buddy nos lleva por un viaje musical que nos recuerda el folk, blues, country y bluegrass que hizo famosos a artistas como Pete Seeger (el cual, a sus ochenta y pico de años, aparece en el disco). Musical y líricamente es un disco menos exuberante que el Chavez Ravine pero no por eso menos nostálgico por una época en que la solidaridad y la hermandad eran una prioridad para gran número de estadounidenses.


El ultimo capitulo de esta trilogía es I, Flathead el cual se enfoca principalmente en la vida y milagros de Kash Buk, un corredor de automóviles en los desiertos salinos de California (el “flathead” del título es un tipo de motor para un Ford). Manteniéndose fiel a sus costumbres, Cooder nos recuenta esta vez también a una subcultura olvidada de corredores de automóviles que viajan hasta las temperaturas inaguantables del desierto con el único motivo de darle rienda suelta a su adrenalina. Líricamente, el disco es menos coherente y lineal (probablemente debido a que la historia viene relatada principalmente en un libro que acompaña el disco). Pero nos remite a una época de forajidos inquietos cuyas casas eran moteles y cuya vida era dedicada a sus carros de carreras. En el camino encontrarán amor, lujuria, dolor y, no podían faltar, extraterrestres. Musicalmente no es tan interesante como los anteriores dos discos, sigue un mapa musical relativamente predecible con roots rock, folk, country, música tex-mex, etc. Pero es un más que disfrutable punto final para esta trilogía californiana (además de que incluye una de las mejores canciones en estos tres discos, 5000 Country Music Songs).


Ry Cooder volvió de su estancia en Cuba con una celebración de su país natal. Pero no es una celebración ciegamente patriótica, sino que lo que busca es resaltar esas cualidades que hacen de Estados Unidos una gran nación: su diversidad, solidaridad y libertad para hacer de la vida lo que cada uno quiera con ella. Los villanos de estos discos son, apropiadamente, las fuerzas de la represión, la intolerancia y el egoísmo. En su totalidad, esta trilogía funciona como un comentario político de repudio a los valores que han venido a definir a Estados Unidos desde los años de Reagan de la misma manera que funciona como una celebración de la música y cultura de la nación más grande del mundo.

Links:

Chavez Ravine (Rapidshare)

My Name Is Buddy (Rapidshare)

I, Flathead (mediafire)

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